sábado, 18 de enero de 2014

Puede que nos cansemos.

-Podríamos dejarlo ahora y nadie saldría herido.
-Sí, pero creo que si lo dejáramos ahora yo saldría herido.
-Así que pase lo que pase… ¿Alguien saldrá herido?
-Puede que no, puede que nos cansemos.
-Dios... espero cansarme de ti. Te tengo en mi cabeza, eres lo único que tengo en mi cabeza cuando me despierto cada mañana, te tengo en la mente antes incluso de abrir los ojos.
-¿Y en qué piensas?
-Eso depende… si es un día en que no sé si voy a verte estoy ansiosa buscando excusas para ir a la ciudad a verte.
-¿Y cuándo sabes que nos veremos?
-Esos días estoy calmada y me odio a mi misma.